Conseguir autorización de las autoridades ambientales para la poda de árboles, con el fin de evitar riesgos que puedan ocasionar daño a la infraestructura o lesiones a las personas es el conducto regular.

Y efectivamente la empresa Emelce SA.ESP, tramitó solicitud de permiso de aprovechamiento forestal de árboles aislados para poda y tala; obteniendo a su vez autorización por parte de la corporación CDA mediante resolución DSG-069-2021, para realizar la Poda y tala de los árboles seleccionados, incluyendo medidas de compensación consistentes en entregar cinco árboles plantados por cada uno talado, que se sembrarán en áreas adecuadas para la especie Oti(Licania tormentos a) de la que no sabemos su nombre común, hasta aquí todo bajo la norma.

Sin embargo, la comunidad cuestiona por qué no se podó y sí se procedió a talar árboles que forman parte del paisaje urbano, contribuyen al equilibrio ambiental y que estaban en buen estado; su único defecto la posible altura con afectación al cableado eléctrico que de por sí tiene cobertura aislante precisamente para evitar riesgos y a los que se les podía haber hecho poda aérea para evitar talarlos precisamente hoy, cuando el mundo clama por su preservación, debido al cambio climático que azota al planeta, a ” nuestra casa común”.

En Inírida se talan sin pensar que al cortar un árbol todo el dióxido de carbono que ha consumido se suelta a la atmósfera, contaminando el aire, contribuyendo al efecto invernadero, además, son hábitats para las aves que allí anidan y medio de vida para los humanos al limpiar el aire contaminado por la emisión de gases producto de los vehículos que por este sector transitan.

Los árboles como los humanos tienen su misión en el planeta, producir humedad, dar equilibrio al ambiente y embellecer el paisaje urbano, árboles en buen estado que no atentaban contra la vida humana y que si la estaban protegiendo sustentando un ambiente limpio y fresco.

Finalmente, si de proteger las redes eléctricas se trata, lo razonable entonces es: establecer entre la empresa Emelce y la corporación CDA un plan de podas para podar y no talar sin atentar contra la naturaleza y el medio ambiente, éso es lo correcto.

Ahora, sólo resta hacer seguimiento a qué se cumpla lo ordenado por la autoridad ambiental CDA y es la siembra de los nuevos árboles y que se cumpla con el respeto por el medio ambiente ayudando a cuidado
y preservacion para el bien del planeta tierra.

María Esperanza Castro Torres pastoral de las comunicaciones vicariato.