Las velitas y faroles de todos los colores llenan de magia la noche con la que inicia oficialmente la navidad.

Ésa noche, se conmemora el momento en el que el arcángel Gabriel anunció a María que fué elegida, desde antes de su nacimiento para ser la madre de Jesús.

Hoy los habitantes católicos del planeta, colocan lindos faroles multicolores iluminados con velas en su interior en los frentes de las casas y algunos en los andenes para celebrar la Inmaculada Concepción.

Por tradición son de fabricación artesanal con papel decorado, celebración que se realiza el 7 de diciembre en la noche y continua hasta el día 8 que es el día de María Inmaculada.

Usualmente, el color de las velas es verde y blanco; verde porque simboliza la luz de la esperanza y la fe; y blanco la pureza que se relaciona con la virgen María.

El ritual de encender las velitas es, una por cada deseo personal haciendo oraciones esto claro está, reunidos en familia y con los amigos más queridos, eso sí, cuidando de que los más pequeños o sea lis niños no corran peligro de quemarse y ojo mucho cuidado con los accidentes.

María Esperanza Castro Torres pastoral de las comunicaciones vicariato.