Tras largas reflexiones en diferentes países de América, ya no se habla más del día de la raza, ni tampoco del día del descubrimiento de América; si no más bien, se empieza a conmemorar el lado más oscuro de éste proceso, y desde ahí, empieza a llamarse o denominarse encuentro de dos mundos.
Se ha tomado con mucha fuerza el discurso indigenista; se asocia un poco con el poder económico actual, con el poder de los conquistadores en su época; es una referencia simbólica al poder.
Desde hace muchos años, exactamente 1992, en adelante, la percepción sobre cómo se ha trabajado la imágen del Indígena en la historia, una conquista violenta, genosida con muchos muertos.
El mundo Indígena ya validó su perspectiva sobre el abuso en América Latina, y los abusos de poder por los conquistadores, la corona y la iglesia, en éste encuentro de dos mundos.
La problemática Indígena para el siglo XXI, exige replantear un montón de formas y estructuras. Lo especial es, que obliga a las naciones a repensar, cómo construyen sus propias repúblicas, y cómo vamos aceptando otras nociones de otros pueblos dentro de la nación. El problema ambiental, le da mucha razón a los indígenas.
La mejor forma de conmemorar el 12 de Octubre es dedicar este día a la reflexión, que evidencie la interculturalidad, la convivencia entre culturas y razas diferentes; pero entendiendo que esa convivencia también es conflictiva.
Entonces, deberíamos reflexionar sobre las diferencias de poder, que existen entre las diferentes razas del mundo.
María Esperanza Castro Torres pastoral de las comunicaciones vicariato.