Mónica significa mujer de oración, famosa por haber sido madre de San Agustín, nació al norte de África en el año 332, vivió hace más de 16 siglos, y sufrió los mismos problemas que hoy aquejan a tantas madres, la enemistad de una suegra difícil, la murmuración y la envidia y sobre todo la angustia de un hijo pernicioso y lejano de Dios, su querido Agustín.

Ante tanta dificultad, Mónica se puso en manos de Dios y de la oración permanente en la que nunca dejo de pedir por la conversión de su marido y su suegra que eran paganos, y Dios escuchó su plegaria.

Con Agustín, la conversión fué mucho más difícil, le gustaban los placeres mundanos, tuvo un hijo sin matrimonio, perteneció a la secta maniquea; sin embargo no hay nada más poderoso que las lágrimas de una madre si se derraman ante Dios.

Su hijo llegó a ser obispo, , santo y doctor de la iglesia, y Santa Mónica sigue siendo para nosotros un modelo de madre y esposa cristiana.

María Esperanza Castro Torres pastoral de las comunicaciones vicariato.